jueves, 9 de julio de 2009

hielo


Me desperté entre un montón de cuerpos que me aplastaban contra el hielo. Los demonios me susurraban que los acompañe y me fui con ellos hasta poder escalar todos esos cuerpos que se posaban sobre mi.


Entre uno de esos cuerpos pude reconocer al mio, era el único cuerpo lastimado, era el único cuerpo derretido, era la única piel quemada y era mi cuerpo antiguo.


Hoy mi alma se posó en ese cuerpo, lo quiso curar y los demonios lo vieron y de nuevo quisieron aplastarme contra el hielo. Cuando estaba por llegar a la cumbre de cuerpos, me caí sobre una gota y en gota me convertí, los demonios se fueron pero yo me convertí en hielo, ya no me sentí aplastado ahora estoy por encima de mis espectros.


Oh! que alivio es sentirse libre! amo la libertad!... De repente vuelvo a ver a mi cuerpo, despierto y ya no soy ni gota, ni hielo, ni espectro, solo soy mi cuerpo, mi alma, mis demonios y los cien mil cuerpos que me aplastan contra el hielo.